Caminamos hacia Andorra reviviendo experiencias de anteriores expediciones

El próximo mes de octubre iniciaremos de nuevo las caminatas por el Camino de Andorra, recordando la expedición del año 1937, que ellos llamaron el «Paso de los Pirineos».

Transcribo una parte del escrito que, con fecha 18 de abril de 2008, publicó María Pilar Torra en este mismo Blog del Caminante, porque pienso que define muy bien el espíritu de estas caminatas mensuales.

«Antes que nosotros, mucha gente ha recorrido este camino: contrabandistas o maquis; santos y pecadores; fugitivos de la justicia, fugitivos de la injusticia; ancianos y jóvenes… Es como el camino de la vida…. Los hay que han pasado por él sin pena ni gloria; los hay que han perecido en él, a algunos los han matado y están enterrados en el camino… Otros han escrito la historia o han dicho cómo se hace el recorrido… Y cuando se perdió la costumbre de transitarlo, algunos han recuperado los diarios de los caminantes, han seguido los pasos que están descritos en los textos que se conservan, han hecho el mismo camino, han consultado a gente experta, han sumado esfuerzos, han ilusionado a mucha gente y el antiguo camino ha resucitado…

Los caminantes somos de edades muy diversas: desde niños y adolescentes a adultos y casi ancianos… palabra bonita si el espíritu es aún joven… Algunos llegarían muy pronto al final de la etapa, pero esperan a los adolescentes que se entretienen con sus juegos, o ralentizan el paso para esperar a aquellos que tienen más dificultades en las subidas… La diferencia de edad no importa si el espíritu es el mismo…

Compartimos lo que tenemos: agua, frutos secos y todo tipo de comida. Y si el frío nos sorprende, también la ropa de abrigo…. I, si hace falta, algún bastón…

A menudo el paisaje nos maravilla: de golpe, las montañas blancas aparecen ante nuestros ojos y nos sorprende, una vez más, la belleza de la Creación… Y se nos dilata el corazón i el alma…

La lectura de las aventuras y desventuras de los que dejaron escrito el paso por el camino en los momentos difíciles del año 37 nos deja mudos, impresionados. Somos conscientes que seguimos sus mismos pasos, que nos paramos en los mismos lugares, que ahora el camino es mucho menos difícil que en aquellos momentos, que muchas personas han trabajado para hacer el camino más claro, más seguro, más amable…»

Os animamos a todos a venir con nosotros cada segundo sábado de mes y así en 10 meses, casi sin daros cuenta, podréis hacer la totalidad del Camino de Andorra.

Para tener más información sobre las caminatas mensuales, entrad en el apartado Agenda, Plan de Caminatas 2008 -2009, del 11 de octubre de 2008.