Atrévete a seguir sus pasos
Todas a todo
Nada podía impedir que este año volviésemos a Pallerols.
Esta vez éramos once universitarias de Alumni College, de Pamplona, las que decidimos seguir y revivir el tan deseado paso de los Pirineos.
De nuevo acudimos a Jordi, quien nos planificó cada día.
En cuanto tuvimos el plan de acción comenzamos a estudiar las etapas, vimos el último documental que la página web ofrecía la Associació d’amics del Camí de Pallerols y nos llenamos de ilusiones y ganas de que llegasen esos días.
Llegó la tarde en la que nos encontramos en Pallerols. Ahí nos recibió Ramón, una piedra viva, alguien sin el que no hubiésemos podido entrar cada día en aquel campo de acción, que siempre estaba al inicio y en el punto de extracción tan deseado.
El «efecto Pallerols» del que Ramón nos hablaba inquietaba nuestra curiosidad, lo fuimos entendiendo a medida que pasaban los días.
Jordi seguía nuestros pasos y nuestra respuesta siempre se dirigía con ese «todas a todo».
Por «esos pasos», por «esos diarios», por «esas señales», queremos compartir nuestra experiencia que podéis ver en los comentarios que hacemos a esta noticia.
Moltíssimes gràcies pels vostres comentaris.
¡Benditas sonrisas!
Transmiten alegría
¿Qué tiene ese Camino?
Que comentarios tan honestos y sinceros. Enhorabuena a estas valientes chicas que sin duda han sabido encontrar alegría en penosas etapas de camino montañoso e incómodo.
Muchas gracias por vuestros comentarios y agradecimientos a Jordi y su equipo.-
No me cansaré de hacerlo y hablar de él.
Una búsqueda que libere, nuevos descubrimientos que impulsan y fortalecen tus decisiones, experiencia revivida de modo diferente por la situación, las personas y la riqueza que esconde siempre el presente vivido en presencia de Aquel que llenó el corazón de contento de San Josemaría y de Aquella a la que encomendamos el camino personal.
Hacer el Paso de los Pirineos, es una de esas experiencias que hacen que redirijas el sentido de tu vida. Cada paso que dimos siguiendo el camino que recorrió un santo, nos ha hecho reflexionar y aprender un poco más sobre la historia del Opus Dei y de la vida de San Josemaría.
Al principio, tenía bastante miedo por no poder estar físicamente preparada, pero a pesar de eso, al empezar a andar tenías el apoyo del resto del equipo y cuando una no podía más estaban las demás para animarla y poco a poco nos fuimos dando cuenta de que estábamos “todas a todo”.
Mientras seguíamos las marcas azules y amarillas, nos recordaban que no son unas marcas cualquiera. Pues en cada paso el azul nos recordaba que ahí está la Virgen, que nos cuida y nos ayuda no solo a subir a la cima de la montaña, sino a llegar a la cima en cada objetivo de nuestras vidas. Además, el color amarillo, nos recordaba a la rosa que encontró San Josemaría. Esa rosa que le hizo seguir el camino al que Dios le invitaba, recordándole que se podía fiar de Él en cada paso que iba a recorrer.
No sé muy bien por donde empezar pero soy más de playa que de monte, que es mucho decir. Cuando uno quiere, si va con Dios, puede, y subir un monte en presencia de Dios no es simplemente subir.
El Paso de los Pirineos ha sido algo que me ha ayudado a ver cómo Dios está presente en nuestras vidas. Cómo está presente tanto cuando subimos a la cima, que subimos si queremos y podemos porque vamos con Dios, pero también está presente en la bajada (que por lo general sería más fácil). Está presente en el momento en el que el sol pega pero también cuando pasamos por una sombra con una brisa que nos refresca de arriba a abajo.
En la vida es igual, Dios está presente en cada momento aunque nosotros le busquemos más en los momentos difíciles también está cuando las cosas van bien.
Por otro lado, poder hacer algunas etapas de las que hizo san Josemaria ayuda a acercarse a la obra ya que fue una parte de su vida muy importante y muy dura. Ahora cuando leo los diarios de los que iban con él, me lo imagino todo y pensar las condiciones en las que tuvieron que subir semejantes montes tiene su mérito.
Es importante agradecer todo lo que tenemos porque muchas veces pensamos que es lo que nos merecemos o lo que debemos de recibir cuando en realidad no nos merecemos nada y sin Dios nada somos.
Para mi el paso de los Pirineos ha sido una experiencia de superación y me ha ayudado un montón a conocerme a mi misma y las capacidades que realmente tenemos todos los seres humanos. Además me ha despertado curiosidad por el origen de la obra y la vida de san Josemaría ya que me ha ayudado a ver todo lo profundo y bonito de la Obra y a querer conocer más.
Estoy muy contenta de haber realizado las etapas del paso de los Pirineos. Me ha ayudado a seguir las huellas de san Josermaría y a pedirle ayuda para seguir sus pasos y ser muy fiel en el Camino.
Ha sido una experiencia brutal, por una parte me ha ayudado a darme cuenta del sacrificio que hicieron por la obra san José María y todos los que le acompañaron. Me parece que no puedes entender la historia del todo hasta que vives el paso de los Pirineos tú mismo, cambia mucho leer todo lo que hicieron a vivir la experiencia.
También me ha ayudado a hacerme más fuerte por dentro. Ha habido ocasiones en las que nos hemos visto tanto en nuestro límite físico como en el mental y ha sido en esos momentos cuando todas hemos demostrado la fortaleza que igual no sabíamos que teníamos.
Por último, me he dado cuenta de que servir a los demás te hace más feliz. Todas estábamos muy alegres y me he dado cuenta que vivir con alegría tiene mucho que ver con estar pendiente de servir a los demás, ver que necesitan, hacerles la vida agradable, olvidándome de mi, de mi cansancio, de lo que me apetece.
La verdad es que a pesar de no conocer muy a fondo el Paso de los Pirineos, iba con grandes expectativas, sin embargo, fueron claramente superadas.
Haber tenido la posibilidad de “revivir” el sufrimiento de san Josemaría y haber podido transformar ese sufrimiento en grandes intenciones es sin duda, lo mejor que me llevo. Sin olvidarme por supuesto de la fuerza interior que hemos adquirido y el espíritu de superación no solo de cada una, sino como grupo. Una experiencia inolvidable!!!
Pallerols tiene muchas cosas, una gran historia, una vista increíble, es una experiencia única, pero sobre todo, te hace crecer desarrollando una gran fortaleza interior y entrar en sintonía con aquello que vivió San Josemaria.