Los pasados días 1 y 2 de diciembre de 2007, se celebró en Pallerols de Rialb la Fiesta de la «Trobada de la Rosa», con la que la «Associació d’Amics del Camí de Pallerols de Rialb a Andorra» conmemora anualmente, desde hace cinco años, el hecho de que san Josemaría Escrivá de Balaguer encontrase una rosa de madera dorada en el interior de la iglesia de Pallerols, al amanecer del 22 de noviembre de 1937.

Esta hallazgo fue para él una señal que le confirmó en su decisión de continuar su camino hacia Andorra, después de una noche de fuertes dudas y sufrimientos interiores sobre si hacía bien o no continuando su viaje hacia aquel país, dejando Madrid en donde había estado escondido desde el 18 de julio de 1936, al inicio de la guerra, a causa de la persecución religiosa de la época.

Los dolorosos acontecimientos de aquella noche del 21 al 22 de noviembre de 1937, así como la alegría del hallazgo de la rosa al amanecer del 22, están descritos con detalle en el volumen II del libro “El Fundador del Opus Dei”, del historiador Andrés Vázquez de Prada. Editorial Rialp.

Breve resumen histórico

En el reverso de la hoja de los “goigs del Roser”, que hemos editado especialmente para este año, hay un breve resumen de los días que pasó por estas tierras de la Baronía de Rialb y del Alt Urgell, que transcribimos a continuación:
San Josemaría, juntamente con otras personas más jóvenes que le acompañaban, salió de Madrid el 8 de octubre de 1937 en dirección a Valencia y seguidamente a Barcelona, a donde llegó el día 10 por la mañana. Permaneció en esta ciudad 41 días esperando el aviso de ponerse en marcha, que finalmente llegó de la mano de Mateu Molleví Roca, de Cal Mateu de Peramola. El 19 de noviembre salieron en el autobús de la Seu d’Urgell llegando al atardecer al puente de Peramola, pasado Oliana, en donde les esperaba Antoni Bach Pallarès, “el Tonillo”, que los condujo a Peramola para que pudieran pasar la noche en un pajar, propiedad de la familia Segon. Al día siguiente, muy de mañana, su hijo Paco, los condujo a Cal Vilaró de Pallerols, en donde san Josemaría celebró Misa los días 20 y 21 de noviembre. Al atardecer del 21, subieron a la rectoría de Pallerols para pasar allí la noche, en una dependencia construida en la parte alta de lo que antiguamente había sido un ábside de la iglesia. Fue una noche de gran sufrimiento interior, una nit de fosca i dol, como dice una estrofa de los “goigs del Roser”. Al amanecer del día 22, por una especial intervención de la Virgen, Madre de Dios, superó esta dolorosa prueba, reencontró la paz perdida y quedó convencido que tenía que continuar hacia Andorra para realizar en libertad el encargo de hacer el Opus Dei, que Dios le había confiado el 2 de octubre de 1928.
Cinco días estuvieron aún escondidos por los bosques de Pallerols, protegidos por Pere Sala de Cal Vilaró y por Lluís Campabadal de Ca l’Empordanès, hasta que al atardecer del 27 de noviembre, guiados por la gente de Peramola, salieron hacia la Espluga de les Vaques, en el Barranco de la Ribalera, zona que estaba bajo la protección de los dueños de Juncàs, Josep Boix y Maria Oste. Llegaron allí al amanecer del día 28 y enseguida san Josemaría celebró la Misa, que fue la última en tierra catalana. A primera hora de la tarde del mismo 28, apareció el guía principal, Josep Cirera, que se hizo cargo de la totalidad de la expedición, más de veinte personas, conduciéndolas con firmeza hasta Andorra, a donde llegaron el 2 de diciembre de 1937 después de no pocos sufrimientos y dificultades. En el camino hacia Andorra hemos de destacar la ayuda de la familia Coll de la casa de Fenollet y de la familia Bentanachs de la casa del Baridà, así como de otras personas que se han quedado en el anonimato.
Poco antes de llegar a Mas d’Alins, ya en tierra andorrana, pasaron al lado de la ermita de Santa María de Feners, en Argolell, recibiendo así la última caricia de la Virgen. En muchas ocasiones y de manera habitual a lo largo de su vida, san Josemaría acudió a la Virgen María buscando ayuda y protección. Con este poderoso auxilio superó siempre los obstáculos y contradicciones que nunca le faltaron, y con ello obtuvo la alegría propia del que se sabe un hijo pequeño en los brazos de su Madre.


Celebraciones con motivo del 70 aniversario del paso

Al conmemorar este año el 70 aniversario, hemos querido hacerlo con especial solemnidad, organizando dos actos:
– El sábado día 1 de diciembre, un acto cultural en Peramola sobre “Caminos de libertad a través de los Pirineos”, con la asistencia de autoridades e historiadores.
– El domingo día 2 de diciembre, un acto religioso en Pallerols, con la celebración de la Eucaristía presidida por el obispo de Urgell, Mons. Joan Enric Vives.
– Algunos de los asistentes a los actos aprovecharon estos dos días para visitar varios lugares del Camino de Andorra. El sábado día 1, un grupo de Girona fueron a pie des de la casa de Fenollet hasta el río de Cabó. El mismo sábado por la noche, un numeroso grupo de chicos de Lleida y muchos padres durmieron en tiendas de campaña en el Hort de la Rectoria, al lado mismo de la Font de Pallerols. El domingo día 2 muchos aprovecharon para ir a la Cabaña de San Rafael, la Balsa y algunos fueron incluso a la Casa del Corb. Otros se entretuvieron por los alrededores de Pallerols. En conjunto fueron unos días aprovechados intensamente con actos culturales y religiosos y de descanso familiar.


Sobre el acto cultural

En relación al acto cultural del día 1 de diciembre, hemos de decir que se celebró a les seis de la tarde en la Fonda la Masía de Peramola con la participación de dos mesas redondas: una de políticos de la zona y otra de especialistas en historia contemporánea. El título general de este acto cultural fue “Caminos de libertad a través de los Pirineos”, con un análisis en profundidad de los caminos de evasión a través de los Pirineos y una propuesta de reconciliación y de respeto a la libertad.
La mesa redonda de los políticos fue presentada por Ignasi Forcada, autor de varios libros de caminatas por zonas de Catalunya y vice-presidente de la “Associació d’Amics del Camí de Pallerols de Rialb a Andorra”. Juntamente con Ignasi Forcada, hablaron las siguientes personalidades: Joan Pallarès, alcalde de Peramola, que dio la bienvenida a los asistentes; el alcalde de la Baronía de Rialb, Pere Prat, que remarcó la apuesta decidida que ha hecho el ayuntamiento de la Baronía para impulsar el turismo rural y cultural en su territorio, entre los que se encuentra el camino que recorrió san Josemaría. El presidente del Consell Comarcal de l’Alt Urgell, Jesús Fierro, insistió en la misma dirección de revitalizar el territorio, congratulándose vivamente de las iniciativas que lleva a cabo la “Associació d’Amics del Camí”, en el trazado, limpieza i señalización del llamado Camino de Andorra, que sigue las mismas trazas por donde caminó san Josemaría y muchos otros fugitivos que como él consiguieron llegar a Andorra durante los dolorosos días de la guerra civil española de 1936. Finalmente el director general de “Arquitectura i Paisatge de la Generalitat de Catalunya”, Joan Ganyet, alabó especialmente los esfuerzos que hace la Asociación, con bellas metáforas de los caminos como una red que facilita la vida de los pueblos y personas, al igual que el sistema circulatorio del cuerpo humano que reparte vida por todo el cuerpo. Todos ellos dieron las gracias repetidas veces a la Asociación por los meritorios trabajos de recuperación de los caminos y edificios singulares que lleva a cabo y que son una importante aportación para la recuperación de la memoria cultural e histórica de Catalunya.
La segunda mesa redonda fue presentada por Jordi Piferrer, autor del libro “Camino de Andorra” que describe el itinerario que siguió san Josemaría hasta llegar a Andorra al amanecer del 2 de diciembre de 1937. Denunció los regímenes totalitarios que obligan a muchas personas a buscar caminos de evasión para recuperar la libertad perdida y destacó el profundo amor a la libertad que vivió y predicó san Josemaría a lo largo de su vida. Los demás componentes de la mesa fueron: Francesc Beato, vice-presidente del Centre Excursionista de Catalunya y Ferran Sánchez Agustí, escritor de diecinueve libros y referencia obligada cuando se han de tratar temas de caminos de evasión a través de los Pirineos.
El primero hizo un interesante resumen de los principales caminos de paso a través de los Pirineos desde un punto de vista geográfico, con detalles concretos sobre las edificaciones de ayuda existentes a ambos lados de los Pirineos. En el lado español se les llamaba hospitales y en la parte francesa se les llamaba hospicios, que estaban estratégicamente situados para servir de refugio a los caminantes que se aventuraban a pasar los Pirineos, sobretodo en las épocas de invierno muy peligrosas en aquellos parajes.
Ferran Sánchez Agustí hizo un erudito resumen de algunas expediciones de evasión a través de los Pirineos y de los pasos empleados más frecuentemente. Analizó de forma sintética y precisa algunas expediciones de fugitivos a causa de la persecución incontrolada de los anarquistas y libertarios, durante los años 1936 -1939; otros itinerarios de huida durante la represión franquista posterior y finalmente explicitó varias expediciones de entrada a España durante la segunda guerra mundial.
Finalmente María Pilar Torra leyó un escrito de Jordi Pasques, presidente del Grup Excursionista d’Oliana, que no pudo asistir al acto por cuestiones profesionales pero que nos hizo llegar su mensaje de adhesión y alabanza por los trabajos que realiza la Asociación.
Acabadas las mesas redondas, hubo un piscolabis con todos los asistentes, más de 130 persones de toda Catalunya. Muchos del mismo Peramola, de Oliana y otros sitios del Alt Urgell, así como también asistió gente de otras zonas de Lleida, y muchos otros venidos de Girona y de Barcelona.

Fotografías del acto cultural en Peramola, día 1.12.07

Primera mesa redonda (de izquierda a derecha): Ignasi Forcada, Joan Ganyet, Joan Pallarès, Jesús Fierro y Pere Prat.
Primera taula rodona (d’esquerra a dreta): Ignasi Forcada, Joan Ganyet, Joan Pallarès, Jesús Fierro i Pere Prat
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Vista general de la sala
Vista general de la sala
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Segunda mesa redonda (de izquierda a derecha): Ferran Sánchez Agustí, Francesc Beato, Pilar Torra y Jordi Piferrer.
Segona taula rodona (d’esquerra a dreta): Ferran Sánchez Agustí, Francesc Beato, Maria Pilar Torra i Jordi Piferrer

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Algunos de los asistentes
Alguns dels assistents
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Sobre el acto religioso
El día 2, empezó con la celebración religiosa en Pallerols con la asistencia del obispo de Urgell, Mons. Joan Enric Vives Sicília. Llegó a Pallerols hacia las 12 del mediodía. Visitamos con él los lugares más emblematicos de Pallerols en donde san Josemaría pasó la noche del 21 de noviembre, con el recorrido que hizo el santo cuando encontró la rosa en el interior de la iglesia de Pallerols. A las 12 rezamos todos juntos el Ángelus en la explanada que se había preparado delante de la iglesia. Hacía un sol resplandeciente. El Sr. Obispo aprovechó para dirigir unas palabras de bienvenida a todos los asistentes que iban llegando. Hacia las 12,20 empezó la procesión, saliendo de la iglesia e iniciándose con los cantos de los nuevos “goigs del Roser de Pallerols”. Éstos han sido realizados bajo la dirección de Amadeu Rocamora. La música es de Odilò Ma Planàs y la estrofa dedicada a san Josemaría la ha compuesto Oriol Diví, los dos, monjes de Montserrat. La orla es del artista Xavier Cabanach.
Llegados al edificio de la antigua escuela, nos esperaba la nueva imagen de la Mare de Déu del Roser de Pallerols, una talla de madera realizada por el escultor de Olot, Joan Montero, y policromada en los talleres Ibars, de Barcelona. El Sr. Obispo bendijo la imagen y continuó la procesión para entrar de nuevo en la iglesia. Durante la procesión empezó a llegar una espesa niebla que no nos abandonó en todo el día, al mismo tiempo que bajó la temperatura y fue necesario abrigarse un poco más. El ambiente de sol al inicio de la jornada con el contraste de la niebla y el frío del resto del día, sirvió de motivo al Sr. Obispo para la homilía de la misa: las dificultades, las luchas internas y los sufrimientos que tuvo que superar san Josemaría los días de estancia en estas tierras, simbolizadas por la niebla, fueron superadas por la luz que le dio la Virgen con el encuentro de la rosa. Continuó la homilía con hermosas referencias a la Madre de Dios como una enamorada que da la rosa al enamorado, al revés de lo que pasa en la tradicional fiesta de san Jordi que es el enamorado que da la rosa a la enamorada. Glosó también las lecturas y el evangelio del día. La misa fue concelebrada por cinco sacerdotes: presidida por el Sr. Obispo, le acompañaban Mn. Joan Pujol, vicario general del obispado de Urgell; el Dr. Antoni Pujals, vicario del Opus Dei en Catalunya; Mn. Bonifaci Fortuny, antiguo rector de Ponts y encargado actualmente de algunas iglesias de la Baronía de Rialb y Mn. Enric Moliné, sacerdote de la Prelatura del Opus Dei, nacido en la Seu d’Urgell y muy ligado culturalmente a la diócesis de Urgell.

Acabada la misa se rezaron unas exequias para los difuntos de Pallerols. A continuación hubo un piscolabis delante de la escuela del pueblo para celebrar la fiesta. Asistieron en total unas 450 personas de muchos lugares de Catalunya. Más de 150 personas se quedaren a comer por los alrededores de Pallerols. Agustí Sala, de Cal Vilaró, preparó comida para unas 80 persones y otros comieron de lo que se habían traído.
El Sr. Obispo y otras autoridades comieron en la masía de Ca l’Empordanès invitados por los propietarios, Lluís Campabadal y familia con la presencia de Marina Finestres, la madre de Lluís, que el año 1937 tenía 14 años y recuerda muchos aspectos interesantes de como era Pallerols por aquellas fechas.
A las 4 de la tarde hubo el rezo del Rosario, que fue dirigido por Mn. Joaquim Monrós, sacerdote de la Prelatura del Opus Dei, nacido en la Seu d’Urgell, y con la asistencia de Mn. Jaume Mayoral, rector de Ponts. Finalizaron los actos de la celebración solemne de este 70 aniversario con la veneración de las reliquias de san Josemaría y acabando con el canto del Virolai, como digno colofón de las fiestas en honor de la Mare de Déu del Roser de Pallerols, en recuerdo y agradecimiento por el inmenso favor concedido a san Josemaría al amanecer del 22 de noviembre de 1937.


Los voluntarios

Sin la cooperación desinteresada de muchos voluntarios no hubiera sido posible realizar esta Fiesta.
Hemos de destacar las siguientes personas: Mercè Betriu y Conxa Blasco por sus trabajos en embellecer la iglesia y los altares de Pallerols. Francesc Penella, Josep Maria Vila y Manel Feliu por sus trabajos de montaje del altar exterior, instalación de los sistemas de iluminación y audio-visuales, así como en la coordinación de muchos voluntarios que colaboraron en la fiesta. Josep Masabeu y Melcior Mur por el acompañamiento de los cantos con el órgano y el acordeón. Algunas personas del “Cor de pares del Col·legi Canigó de Barcelona” por los cantos de los “goigs” y de la misa. Agustí Sala, de Vilaró y propietario de Cal Mingo, por la confección de las comidas y distribución de bebidas. Mucha gente de la Baronía de Rialb que con sus indicaciones de cómo se hacía antiguamente la fiesta del Roser, han contribuido a recuperar antiguas tradiciones. En especial hemos de hacer mención de la Marina Finestres, de Ca l’Empordanès, i de Domingo Inglavaga, de Cal Guardiola. Una mención especial también para los bisnietos del “Tonillo”, de Peramola, porque han cedido la estructura necesaria para montar la tarima del altar que se habilitó fuera de la iglesia.

Fotografías del acto religioso en Pallerols, día 2.12.07